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jueves, 15 de julio de 2010

Cuenta Cuentos (I)

Dejando de lado curiosidades y temas de actualidad, abro nueva serie de entradas dedicadas a cuentos cortos (o no tan cortos, como es el caso) o historias cortas puestas tal y como fueran escritas por primera vez.


La vida
Vas por el metro con un par de copas de mas encima y ves que un hombre negro te persigue, cruzas al otro anden y notas como el hace lo mismo corres, pero el corre tan rápido como tú .
Te detienes.
Te das cuenta que es tu propia sombra, te ríes un rato porque tu vida es penosa y no te has reído en todo el día.
...





Pillas es metro.
Llegas a casa, tu hijo esta con el reggaetón al máximo que se le va a hacer dice su madre que necesita libertad. Preguntas a tu mujer si la cena está hecha, y te responde con un rotundo “NO!”
Te vas a la ducha, luego al salir abres el armario y ves un frasco de somníferos y te preguntas “¿Cuándo tendré suficiente valor?” cierras el armario y te vas a dormir.
Tu mujer, como buena mujer, ni te dice buenas noches y se va a ver la teletienda hasta el amanecer con un botella de Burbon del ’79.
Te despiertas a las 7 de la mañana, vas al lavabo a lavarte la cara…está muy fría asi que mojas un dedo y te lavas toda la cara con el.
Te malvistes con un traje arrugado y te afeitas dejándote la cara como un campo de maniobras del ejército.
Miras a tu hijo con asco, sabes que no es tu hijo pero bueno según dicen  es tu responsabilidad.
Tu mujer dormida en el sofá.
Sales y das un portazo, para joder porque sabes que es lo mas emocionante que te va a pasar en todo el día.
Pillas el metro.
30 minutos después llegas a tu oficina.
A tu jefe solo le falta escupirte en la cara , piensas, por la manera en la que te saluda.
Te sientas en tu cubículo, y te pones a jugar al buscaminas durante 8 largas horas…también miras porno de asiáticas ya que la idea de que te pillen te pone.
Lo piensas dos veces…
…es muy triste.
A las 5 de la tarde sales miras a un lado de la calle y luego al otro, cruzas y te vas a un bar cercano.
Tras varias copas, se te acerca una mujer destrozada por el alcohol y las drogas.
Tras una charla os vais a un motel.
“¿Qué tengo que perder?” piensas.
Y tras 20 minutos de decepcionante sexo…son las 9 de la noche y te diriges al metro.
Ves a un hombre negro e intentas ir al otro anden pero ves que te sigue empiezas a correr y  ves que va a la misma velocidad…te paras y luego te das cuenta de que es tu sombra te ríes un rato porque tu vida es penosa y no te has reído en todo el día…pillas el metro.
Otro día lo mismo.
Y así día tras día tras día.
Atrapado en una vida sin futuro.
Te diriges al puerto y miras a las piedras desde la posición en la que estas.
“Quizá muera al instante.” Te dices a ti mismo.
Estas a punto de saltar, pero algo te lo impide una voz , una voz femenina.
Es la mujer mas hermosa que has visto piensas.
Te pregunta si puedes ayudarle, que su coche se ha roto.
Dices que si y la ayudas.
Le pides el número de teléfono.
Empezáis a veros esporádicamente, y mientras la conoces desearías haberla conocido 15 años atrás antes de casarte con un pendón.
Los mese pasan, los sentimientos entre vosotros florecen.
Ves esa pequeña luz que necesitabas desde hace tanto tiempo.
Finalmente tienes el valor suficiente para pedirle a tu mujer el divorcio, ella derrama dos lágrimas de falsedad.
Tu la miras asqueado, pero finalmente sale bien.
Te mudas a vivir con el amor de tu vida, dejas tu trabajo ahora sabes que puedes aspirar a mucho mas.
Miras al futuro con decisión quizá algún día casarte con ella y tener hijos y comprar una casa en la playa…comprar tu primer traje a medida.
Te contratan para un buffet de abogados bastante importante.
“¿Que puede salir mal?” piensas.
Los meses pasan, finalmente un día tu mujer hace una cena especial ,cuando llegas a casa, con velas.
Te dice que está embarazada, tu solo puedes esbozar una gran sonrisa y besarle.
Os vais a la cama y la abrazas con fuerza.
Te despiertas al día siguiente abrazado a una almohada, son las 7 de la mañana y tienes que ir a la oficina.
Tu mujer sigue dormida en el sofá y  presientes que llegarás tarde.
Fin.


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